La sala capitular de Sijena representada en su esplendor (parcialmente recuperable) por Valentín Carderera.
Son suficientemente conocidos los antecedentes del conflicto de los bienes de Sijena, por lo que nos permitiremos obviarlos aquí en aras de la concisión. Finalmente, los tribunales han considerado que las ventas de los bienes realizadas en los años 80 y 90 fueron nulas de pleno derecho y que, en consecuencia, los objetos deben ser reintegrados a su lugar de origen, el Real Monasterio de Santa María de Sijena, que desde 1923 es Monumento Nacional y, por tanto, un conjunto cultural unitario, indivisible, y legalmente protegido. El 25 de julio las obras tristemente sacadas de su contexto histórico y artístico tendrán que haber regresado al lugar del que nunca debieron salir.
Leer más